La Ley reconoce que la vida íntima sea respetada:
La Ley reconoce que la vida íntima sea respetada y que sus actos no sean objeto de observación a efectos de que nadie pueda entrometerse en la vida del otro publicando retratos, divulgando secretos.
Todo niño/a tiene derecho a ser escuchado con atención y a tener libertad de expresar lo que piensa y siente.

